Félix Ángel Moreno Ruiz

sábado, 22 de abril de 2017

UN JARDÍN EN SHANGHÁI de Pedro Molina Temboury

EL ALMA CHINA


Un jardín en Shanghái, el último libro de viajes del escritor y guionista andaluz Pedro Molina Temboury  (Málaga, 1955), es una aventura fascinante al corazón de la China actual. Aprovechando una larga estancia en Shanghái como miembro de la delegación española de la Exposición Universal de 2010, el autor se sumerge en la cultura de este gigante asiático de la mano de Chen, un anciano culto y viajero que actúa como su guía e intérprete. Escrita con un estilo ameno en el que están presentes pequeños misterios que dinamizan el relato y le otorgan un atractivo adicional, la obra es una compleja radiografía de la cultura china a través de los ojos de un occidental que, a pesar de haber visitado el país en el pasado, no deja de sorprenderse ante las costumbres de un pueblo atrapado entre la tradición y la modernidad, cuyos habitantes conviven, en un estado de asombroso equilibrio, con un acervo cultural y religioso milenario, con un pujante y salvaje capitalismo, y con el temor (a pesar del aperturismo de las últimas décadas) al régimen político imperante porque sigue todavía muy presente en el imaginario colectivo la brutal represión sufrida durante la revolución cultural. Sin embargo, al final de este largo y apasionante descubrimiento que es Un jardín en Shanghái, el protagonista reconoce ante su amigo Chen que, en realidad, China, “cuando se la conoce bien, se descubre que no es tan diferente al resto de mundo”. 
O, tal vez, sí.

EL ÚLTIMO SOLO DE BUDDY BOLDEN de Gabriel Jiménez Emán

LOS ORÍGENES DEL JAZZ


El último solo de Budy Bolden, del escritor venezolano Gabriel Jiménez Emán (Caracas, 1950), es un largo monólogo interior de setenta y una páginas, en el que su protagonista, el trompetista Budy Balden, uno de los pioneros del jazz clásico, deja fluir la conciencia para contarnos su periplo vital: el nacimiento en el seno de una familia humilde, que malvive en un barrio conflictivo de Nueva Orleans; el descubrimiento de las bandas callejeras de músicos de color, que amenizaban las fiestas y los entierros; la adquisición del primer instrumento, que le permite dar a conocer sus cualidades como trompetista excepcional; sus inicios musicales en los clubes de la ciudad; el descenso a los infiernos a través del alcohol, las drogas y el sexo; las palizas de matones y policías corruptos; sus intentos de regeneración y las consiguientes recaídas. De esta forma, la vida de Budy Bolden se convierte en la crónica de unos años contradictorios, llenos de optimismo y de ansias de vivir, pero también de injusticia social y de racismo. Escrito sin puntos y aparte, en una especie de plano secuencia, en el libro los pensamientos del protagonista aparecen ante el lector de forma atropellada, sin un ritmo definido, como si se tratara de una improvisación, de un solo de trompeta, el último de uno de los grandes maestros del jazz, que es, sin duda alguna, la música popular más influyente en América durante el siglo XX.